Cásate en Guanajuato

Cásate en Guanajuato

Todo en uno. Es como entrar en otro mundo, en donde todas las maravillas se pueden ver, sentir, admirar, recorrer y reconocer. Entrar en contacto con Guanajuato es tener la certeza de que la belleza de México es incomparable, y es que no es sencillo estar rodeado de un estado que lo tiene, literal, todo. Si estás buscando un lugar ideal para dar el “Sí, acepto”, entonces es momento de que conozcas lo que te espera si decides casarte en Guanajuato. Lección número uno: no te vas a arrepentir ¡jamás!

¿Por qué viajar tan lejos si el encanto está tan cerca? Guanajuato es como un pequeño regalo de Italia en México; como una probadita de todo el esquema de color, texturas y construcciones que, sin complicación, podrían convertirse en maravillas del mundo (y de hecho lo son). Sus calles, aunque reducidas, se llenan de increíbles terrazas y balcones que le dan vida a cada paso. Las grandes estructuras se convierten en marcos encantados para las típicas fotos del recuerdo, pero también para aquellos instantes que se inmortalizan con los mismos sentimientos de quienes caminan por sus espacios.

Manejar a través de túneles, compartir un beso en un rincón muy especial, ser testigo de los atardeceres más increíbles y de locaciones que, por supuesto, conjugan la magia del diseño y una buena dosis de historia; formar parte de un pueblo que podría sacarse de un cuento de hadas, o bien, interactuar con campos, viñedos, naturaleza e inspiración por doquier es, en sí mismo, un regalo para los sentidos. Teatros, hoteles, salones, jardines… Aquí hay de todo y para todos.

Y cuando se trata de una boda, de ese día que se planea con tanta ilusión, lo ideal es encontrar una locación en donde se puedan cumplir los sueños a cada minuto. Un “sí, acepto” no sería lo mismo sin la grandiosidad de iglesias que se alzan como verdaderos estandartes de la arquitectura. Con tintes coloniales, neogóticos o churriguerescos, que hacen remembranza del barroco y su maximalismo, en estos lugares el amor se consagra de la misma forma que el arte lo hizo. No es de extrañarse que templos como la Basílica, en Guanajuato; el Templo Expiatorio, en León, o bien, la Parroquia de San Miguel Arcángel, en San Miguel de Allende, se hayan convertido en los marcos referentes de las bodas más encantadoras. Sin dejar de lado, por supuesto, a la Catedral de León. 

Claro que eso no es todo, y es que en Guanajuato también se esconden locaciones ideales para una boda como ninguna otra. La Hacienda San José Lavista, en San Miguel; Hacienda San Cristóbal, Mina de Guadalupe, Instituto Allende, Hacienda Ibarrilla, entre muchas otras, se han convertido en las opciones predilectas de quienes deciden casarse en los míticos espacios del estado. Todo cobra vida con jardines cubiertos de intensos colores, portones con toques avejentados, tonalidades que transforman el espectro del entorno y un cielo que, sí o sí, permanece azul y perfecto.

Sin duda alguna, México se vive por la gran riqueza cultural que cubre a todo el país; sin embargo hay espacios que, al parecer, resultaron bendecidos por la variedad de su infraestructura, el espíritu de se gente, la personalidad de sus calles y la belleza de colores. Todo esto, y mucho más, ha hecho de Guanajuato el mejor lugar para que vivas una boda única, diferente y en contacto pleno con lo más hermoso del país. 

Cuando haya dudas, Guanajuato es la respuesta. No hay más. 

Texto: Melissa Lara

Fotografías: Ricardo Arellano

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